La respuesta es muy sencilla. Debes demostrar que la energía nuclear en España no es segura. Así vivimos en los tiempos de la Ley Mordaza. Para los que todavía no lo sabéis, aquí viene la historia directamente de la página de Greenpeace:

16 activistas y un fotoperiodista independiente se exponen a posibles penas de dos años y ocho meses de cárcel por una protesta pacífica para denunciar el peligro en la central nuclear de Cofrentes (Valencia) el 15 de febrero de 2011. Además, la organización ecologista podría tener que afrontar un pago de 357.371 euros en concepto de multas e indemnizaciones como presunto responsable civil subsidiario.

Lo/as activistas encausados entraron en el recinto y pintaron “PELIGRO NUCLEAR” sobre una de las torres de refrigeración de la central nuclear y expusieron así la falta de seguridad de la planta. El fotoperiodista independiente cubrió la protesta en el ejercicio de su profesión.

Vamos a ver. Entonces 17 personas pueden entrar en una central nuclear con una escalera, subir a la torre y escribir lo que les apetece sin que nadie los pare? Quien deberían ser multados - los activistas y el fotoperiodista, o los gestores de la central, que claramente no proporcionan ni las normas básicas de seguridad para la central. Y esta gente, que no puede parar ni 17 personas pacíficas, es la que está gestionando los residuos nucleares? A mi no me dan mucha confianza. Pero, claramente, hay que castigar los activistas, que han sacado a la luz los fallos humanos de la gestión de la central. Deberían haber quedado en sus casas, con teles encendidas, que es lo que deben hacer los ciudadanos buenos.

No hay que olvidar que no estamos hablando de algo abstracto, pero sobre las vidas humanas. Helena, Sonia, Amanda Luna, Nacho, Virginia, Hernán, Natxo, Marcelí, Sonia, Vicenç, Maite, Araceli, Nelia, Rakel, Auba, Fausto y Pedro. Detrás de cada nombre hay una historia - habrán niños, parejas, padres y amigos que para dos años y ocho meses se quedarían con un hueco en su vida. Cuantas palabras se quedarán sin decir a lo largo de dos años y ocho meses de la cárcel? Cuanto trabajo se quedará sin hacer? En cuantas comidas y cenas se quedará una silla vacía? Os aconsejo ver el vídeo donde aparecen tres de los acusados, para que veáis que es gente de carne y hueso, e incluso gente que podría aportar mucho a este mundo, en lugar de pasar casi tres años en el cárcel viviendo del dinero público y con oportunidades muy limitadas.

Dos años y ocho meses es mucho. Os aconsejo pensar que habéis hecho a lo largo de los últimos dos años y ocho meses - desde el mayo de 2012. Como era vuestra vida en los principios del año 2012? Y que ha pasado desde este tiempo? Cuántos de vosotros habéis tenido un hijo, habéis conseguido un trabajo, habéis adoptado un perro o habéis terminado la carrera? Cuantos amigos habéis conocido durante este tiempo? Cuanto habéis aprendido? Cuanto han envejecido vuestros padres o han crecido vuestros sobrinos? De verdad creéis que alguien merece que le quiten dos años y ocho meses de su vida por pintar dos palabras (o 14 letras) sobre una torre? Por una acción pacífica? Por intentar de hacer este mundo más seguro y más sostenible para todos?

Todavía hay tiempo. El tribunal está al punto de empezar. Os invito que leáis más sobre este caso en la página de Greenpeace o en otras fuentes, que habláis con vuestros amigos, que lo compartáis en los redes sociales. Juntos podemos parar esta injusticia.